En los últimos días se han publicado en diversos medios regionales la siguiente información: “En Francia advierten no consumir huevos por contaminación de planta WTE”. Lo que derechamente es información falsa y que ha sido desmentida por las autoridades del país europeo.

La noticia divulgada por diversos medios, apunta directamente a un supuesto estudio de la Agencia Francesa de Salud Pública, lo que no es cierto. El primer estudio, y único que vincula a la planta WTE con la contaminación en cuestión, fue realizado por una Fundación Holandesa, llamada Toxicowatch, y que ha sido duramente criticada en el ambiento científico, ya que modela sus trabajos a partir de las necesidades de sus clientes. En este caso agrupaciones contrarias a plantas WTE en Francia y Europa.

En el cuestionado estudio se menciona la contaminación por diversos componentes en huevos de gallineros domésticos y, de manera implícita establecía un vínculo entre la incineración y la presencia de estas dioxinas, pero luego en sus conclusiones, el mismo estudio reconoce que el vínculo NO estaba formalmente establecido.

La Agencia de Salud Pública de Francia posteriormente confirmó, a través de un nuevo informe la ausencia absoluta de un vínculo demostrado entre la incineración y presencia de dioxinas en los huevos, pero si confirma la contaminación en los productos.

Syctom, que es la Agencia Metropolitana de gestión de residuos y que maneja las plantas WTE en París cuestionó los numerosos sesgos observados en este informe de Toxicowatch y, en particular, la ausencia de análisis fuera de la zona de influencia de la fábrica, que hubieran permitido comparar los valores obtenidos y por tanto calificar el origen de la contaminación.

Es importante destacar que la planta WTE aludida (Ivry-sur-Seine) cuenta con una clasificación ICPE (Instalación clasificada para la protección de medio ambiente) y, como tal, está sujeto a una estricta regulación de sus vertidos, incluidas las dioxinas.

Los valores medidos a la salida de la chimenea también son sistemáticamente más bajos o muy por debajo de los valores límite reglamentarios.

Tras la publicación de este informe de Toxicowatch, la Agencia Regional de Salud de Francia (ARS) decidió realizar su propio estudio de niveles de contaminantes orgánicos persistentes en el medio urbano.

Se analizaron huevos de 25 gallineros domésticos voluntarios: 14 ubicados cerca de las tres fábricas Syctom (Ivry-sur-Seine, Issy-Les-Moulineaux y Saint-Ouen) y 11 que están lejos de serlo.

La conclusión del ARS confirma el análisis realizado por Syctom cuando se publicó el informe Toxicowatch, concretamente valida la ausencia de un vínculo demostrado entre la incineración y la contaminación de los huevos procedentes de gallineros domésticos: “Los primeros resultados destacan la contaminación de todas las muestras de suelo y huevos tomadas por las tres familias de contaminantes orgánicos persistentes analizados (dioxinas, furanos y PCB). Esto significa que estas tres familias de contaminantes orgánicos persistentes están potencialmente presentes en todo el entorno urbano, y no específicamente alrededor de incineradores.

Syctom agregó en su comunicado de aclaración que:  

“No puede alegrarnos los resultados porque ponen de relieve la contaminación subyacente de todo el denso entorno urbano.”

Syctom, Agencia Metropolitana de Residuos Domésticos, es el establecimiento público responsable del tratamiento y valorización de residuos producidos por 6 millones de habitantes de 82 municipios (París y suburbios cercanos), o el 10% de la población francesa. Cada año se procesan 2,3 millones de toneladas de residuos en un contexto escasez de materias primas y transición energética, todo este desperdicio debe considerarse como recursos.

LA PLANTA IVRY PARÍS

Actualmente IVry Paris es una de las tres plantas WTE que operan en todo París y es tal la importancia que tiene para la gestión de los residuos de la capital francesa, que actualmente está bajo un proceso de transformación y modernización para seguir entregando servicios a toda la comunidad bajo altos estándares ambientales.

La reconstrucción del centro multisectorial de Ivry/París XIII se encuentra entre los mayores proyectos de instalaciones de tratamiento de residuos realizados actualmente en Francia y busca actualizar el incinerador existente por una unidad de recuperación de energía que tratará una cantidad anual de 350.000 toneladas de residuos domésticos mediante la incineración.

La construcción de la nueva unidad de recuperación de energía fue autorizada a finales de 2018, lo que permitió iniciar las obras. Durante la construcción, la planta actual ha seguido funcionando para garantizar a los residentes un suministro constante de energía recuperada de los residuos de 1,4 millones de personas en el área metropolitana de París. En 2024 se pondrá en servicio la planta Waste-To-Energy de París.